Una isla, mis amigos y los Tarpons
En esta vida cada vez más difícil y compleja, siempre he pensado que todos debemos tener, por lo menos, una gran pasión, algo que nos permita apoyar nuestro pie derecho para continuar dando pasos de una manera diferente. Sí, la pasión se convierte en alegría, en motivación, en superación, en ganas de vivir.
Si bien desde niño me gustó la pesca, hace 14 años encontré esta pasión, “la pesca con mosca” que desde entonces me ha dado grandes satisfacciones. Me ha permitido conocer a mucha gente y pescar, pescar y pescar en muchos lugares.
La pesca con mosca nos enseña una gran virtud: La paciencia, a esperar nuestro momento, a saber que siempre habrá un nuevo y mejor día y a que los resultados en lo que se emprende siempre podrán ser mejores.
También nos enseña a ser creativos e innovadores; confeccionamos muestras moscas y nuestras formas para pescar para todas las especies a las que tenemos acceso.
Esta pasión se hace más grande e importante cuando se comparte con amigos con el mismo gusto que te hermanan; y se embellece además, con los preciosos paisajes de mi México, del majestuoso e increíble México.
Este año, junto con tres amigos, Ángel Huertero, Rodrigo Vargas y Marco Antonio Martínez, decidí hacer un muy soñado viaje a la isla de Holbox en Quintana Roo. Y digo muy soñado porque desde que platicaba o leía los artículos de mi amigo Carlos Godoy y nos transmitía sus vivencias y ese gozo por los Sábalos (Tarpons), mi mente ya estaba en esa Isla. De la misma manera, mis amigos Ángel y Rodrigo me emocionaban con sus experiencias en sus viajes anteriores a ese paradisiaco lugar.
Salimos de la Cd. de México rumbo a Cancún el día domingo 10 de agosto del 2014, el plan era pescar de lunes a viernes y regresar el sábado 16.
Durante el viaje, la convivencia y el buen humor nos permitió conocernos mejor como personas y elevar nuestros lazos de amistad. Se trata además de memorizar la lección de los que saben, en este caso de Ángel y Rodrigo, pues para Marco también era su “1ra vez”. Cuando llegues al lugar, 1.- El guía te pondrá los Tarpons enfrente, 2.- Te dirá a que “hora” y cuando tirar, 3.- Trata de tirar a la distancia que te indique, 4.- Deja hundir tu mosca, 5.- Cuando te diga el guía “Ahora”, recoge lo más rápido que puedas, 6.- Si el Tarpon come tu mosca dale un par de jalones con la mano en la línea y otros tantos con la caña, 7.- Déjalo correr, te sacará tu backing, 8.- Cuando brinque hazle la “reverencia” y 9.- Si lo logras traer a la lancha nunca pierdas la tensión de tu línea.
Uttta, eso no me dejaba dormir!!!, Me acordé de mis exámenes de secundaria, cuando estudiaba todo y a la hora de la hora todo se olvidaba. No quería que eso pasara y cuando no quieres que pase, regularmente ¡pasaaa!
Eso no era lo peor, ¡Aunque ya había practicado, nunca había tirado con una caña 12! ¿Cómo serían mis tiros, el movimiento de la lancha, el viento, etc.? ¡En la madre! Y la pregunta constante ¿Lo podré lograr?.
Previamente Rodrigo rentó una camioneta Jeep en Cancún y se inició la travesía a Chiquilá. De ahí en Ferri hasta Holbox y las lecciones continuaban durante el camino y mis nervios…. más.
¡Qué Isla! cuando pusimos un pie en esa hermosa tierra, te enamoras, romántica, turística, rústica, tradicional, por ella no ha pasado el tiempo ni la modernización. ¡Ojalá que nunca la toquen!
Llegamos a la casa de Alejandro Vega “El Ruso”, él no se encontraba pues tenía un torneo en Punta Allen, pero conocí a dos de los Guías Beto y Valentín. Nos dijeron que había mucho Sábalo. La semana pasada habían estado unos argentinos y les había ido muy bien, pudieron subir varios animales.
Nos dieron nuestras habitaciones, me tocó compartirla con Huertero. Beto y Vale nos visitaron esa noche y me armaron el equipo que utilizaría al día siguiente. Caña Sage ix3, #12, Carrete Tibor Gulfstream #12, línea Levitan 400 gms y líder de 100 lbs. Mosca, la Purple Dead montada en un anzuelo 6/0 Tiemco, y a descansar para el día siguiente. Sería mentira decir que dormí de corrido, ¡me desperté 20 veces pensando en la maldita lecciónnn!
Y llegó el día. De la Habitación a la lancha unos cuantos pasos; ese día lunes, me tocó con un guía muy experimentado tocayo de Huertero y de apodo “el Chapu”, a Ángel lo guió “El Gallo” y Rodrigo y Marco compartieron la lancha con Beto como guía.
Las tres lanchas salimos hacia el mismo lugar. Al llegar a la marca, mi guía me dice, “Beto ya los vio”, y sí, vi como Rodrigo y Marco engancharon cada uno un Tarpon, no hubo suerte pues se fueron. Vimos varios cardúmenes. En eso, me dice el Chapo, prepárese, vienen para acá, remó y cruzó la lancha para que pudiera tirar y veía decenas de ellos como a trecientos metros acercándose rápidamente, 200 mts, 100 mts y faltando aprox. 60 mts, me dice, haga un tiro a las 11 lo más lejos que pueda. Parado en la proa hice el tiro; tense la línea me dijo y espere, la mosca se estaba hundiendo. ¡Ahora! ¡Recoja rápido¡, así lo hice y en pocos segundos ¡Saass! ¡Lo tiene, gritó el Chapo!, los jalones a la línea con la mano y con la caña y ¡comenzó a “correr”!, recuerdo el sonido del carrete al salir la línea y el backing.
Como a 50 mts salta y se deja ver. ¡Un Silver King¡, le calculó el Chapo 180 lbs, y siguió corriendo. ¡Ya no tengo Backing, le grité al Chapo!, corrió hacía mí, Ahh sí, ya falta poco, vamos a recuperarlo con la lancha y tu recoges el Backing. Así recuperé unas 100 de las 250 yardas de backing que traía el carrete. A los 10 min. nuevamente corre y lo vemos saltar a 200 mts moviendo todo el cuerpo y la cabeza en el aire y aunque la reverencia estuvo presente, el King se liberó. Quedé maravillado, ¡Que experiencia!. Ese día tuve otros dos tiros, pero no los enganché.
Cerca de las 10:00 hrs. Vemos a Ángel pelear con un King, le había roto la caña en dos partes, tenía una hora peleándolo, ya en ese momento sólo con la mano. Se acercaron también Rodrigo y Marco, Beto saltó a la lancha de Ángel para subir el Sábalo. Después de casi 15 minutos Gallo con la super ayuda de Beto subieron al Tarpon. Todos estábamos emocionados, ¡Ángel sacando sus fotos!, ¡su primer King!. Que gusto nos dio verlo mirar al cielo con los brazos abiertos y gritar ¡Soy el rey del mundooo!!.
El martes 12, nuevamente salimos las tres lanchas hacia el mismo lugar, esta vez con mi guía “el Gallo” y compartí la lancha con Ángel. Rodrigo salió con Beto y Marco con “Chapu”. En un gran gesto Ángel me permitió pescar primero pues él ya tenía su sábalo, sin embargo, los Tarpons no tienen palabra de honor, ese día no se aparecieron. Sólo Rodrigo tuvo un enganche y se soltó, los demás nos quedamos con las ganas de por lo menos tirar.
El miércoles 13, era según una aplicación para la pesca del 14% de efectividad, así que el pronóstico era bastante malo. A partir de este día salíamos cada quien en una lancha. Ángel y Beto fueron en busca de Palometas y Macabies a Callo Ratón; Rodrigo con Tomás; Marco con Gallo y yo con Jossimar. Esta vez comenzamos en otro punto. Enseguida pudimos observar cerca de 10 “escuelas”. Jossi acomodó la lancha a unos que venían acercándose, me dio sus instrucciones y enganché un Tarpon que comenzó a correr hacia abajo de la lancha. Fue demasiado tarde cuando cruzamos la caña por la proa, la línea se hizo tiras al rozar con la lancha y ya no pasaba por las anillas, el King saltó y se liberó a escasos 40 mts de nosotros, el anzuelo lo cerró por completo. ¿Cómo lo hizo?, pues simplemente lo ¡mordió¡, ¡Qué fuerza! recordé a mi amigo Huertero que me decía no uses esos anzuelos, usa los Gamakatsu 5/0, Después de esto usé estos. Hay que hacerle caso al que sabe!!!.
Estábamos cambiando la línea por otra de 500 gms que traía de repuesto, cuando vemos venir otro cardumen. Jossi puso rápido el líder y otra mosca “Purple Dead” mientras yo enrollaba la línea y ponía el freno al carrete. Prepárese que vienen ya cerca. Me pidió un tiro largo a las 10 y después de la acostumbrada letanía, enganché otro King. El animal corrió como 150 mts. Comencé acercarlo, cuando lo tenía a 50 mts, tuvimos que poner la lancha de reversa para liberar el backing pues se había enredado mal. Después de una hora de pelearlo y de tener los brazos engarrotados, se acerca la lancha de Rodrigo. Recuerdo cuando me grita “mira tú mal día pronosticado”. Le grité ¿pescaste?, Siiii gritó, ¿lo subiste? Siiii. ¡Felicidades! y seguí peleando. Rodrigo cogió su cámara y comenzó a filmar.
Cuando el pez de aproximadamente 140 libras estaba a 10 mts y lo comenzábamos a ver, la caña se rompió a la altura del segundo arillo, desde mi punto de vista ya estaba sentida con el sábalo anterior cuando cruzamos la caña por la proa, y lo seguí peleando con el morrito de la caña. Conseguí acostarlo 4 veces para que Jossi lo subiera. Cada vez que lo queríamos subir y se volvía a ir era una pesadilla. Si con la caña entera es difícil, con el morro ufff. Cuidado con las anillas que en cualquier momento se van a desprender, me dijo Jossi, sin embargo resistieron. Le estorbaba la caña rota y no podía agarrar el líder y meter la mano a la boca al mismo tiempo. A la cuarta vez el pez cabeceó y se fue.
Caí desolado en la lancha, pues no puedo mentir, quería esa foto. Me miré los pies y los tenía completamente rojos como si la sangre ahí se hubiera concentrado, el buff, la camisa y el pantalón estaban empapados de sudor y los brazos no los sentía. Siempre le agradeceré a Rodrigo que me gritaba “ No importa mi Paco, ese sábalo cuenta, se tocó el Líder”.
Cruzó medio cuerpo sin bajarse de su lancha, me dio un abrazo y una escama de su sábalo y me dijo “como si fuera del tuyo”. Eso mi estimado Rodrigo es de gigantes y siempre lo recordaré. La risa de Rodrigo con su primer Tarpon en la foto lo dice todo. Me dijo después “!Mi Paco ya me puedo morir!” !!Que alegría!!! Huertero regresó con una foto de un precioso Macabíe.
El Jueves 14 salí con Beto y mi Caña Ross RX #12. Me puso 20 tiros pero esta vez los sábalos no querían mis moscas, Beto me lo decía y yo sentía como le pegaban a la mosca con el cuerpo y sus colas, pero no las tomaban.
El que sí enganchó esta vez fue Marco, lo peleó cerca de hora y media. Un animal de aproximadamente 140 lbs, sin embargo al quererlo subir a la lancha, la caña se partió en tres y el pez se liberó. ¡No importa le gritamos todos!, ¡ese cuenta pues se tocó el líder!. ¡!!Marco no podía ni con su cuerpo pero no cabía de felicidad¡¡¡¡
Después de ver como pelea por su vida y la majestuosidad y belleza de ese animal, me prometí que si volvía a pescar uno, no lo subiría a la lancha, pues simplemente se merecen que no los maltraten. La foto arriba es lo de menos. Con la modernidad actual se pueden filmar abajo y de ahí obtener las fotos.
Ese día a Huertero se le fue un sábalo de aprox 150 lbs que peleó durante 20 min. y Rodrigo se divirtió con los baby tarpon y subió 5 de ellos.
Llegó el último día, todos volvimos a salir con los mismos guías; Ángel con Chapu y Rodrigo con Gallo fueron en busca de Palometas y Macabíes. Marco con Jossi y yo con Beto fuimos por los Tarpons. Llevé mi caña Ross y de repuesto la caña Access #12 que me prestó Rodrigo. Usé una mosca parecida a la Pike Bunny, de cola blanca y cuerpo amarillo montada en el anzuelo Gamakatsu 5/0. Comenzamos a ver los cardúmenes. Beto fue por la escuela más grande, eran más de 100, puso su lancha atravesada y tiré como lo indicó, enganche un animal grande pero al primer jalón con la mano, ¡la caña se truena y el animal se va!.
¡!!No puede ser!!! Otra vez y ahora ni siquiera se sometió la caña a tensión. ¡ !!Que coraje!!! Sabía que era probable que no tuviera otra oportunidad.
Me dijo Beto, no importa hay tiempo, y seguimos buscando. A las 8:10 A.M una escuela más, un nuevo tiro y ¡!SAS!!! clavo otro King, esta vez el animal corrió 200 mts, dio dos brincos antes de detenerse, ¡era un King enorme! de aprox 170 o180 lbs, lo peleé una hora y 40 min. Cuando ya estaba acostado el tarpon, le paso la caña a Beto para que lo liberara y yo tomar video, pues no lo quería subir. Estaba el animal a cinco mts de la lancha y al quererlo traer, Beto hace fuerza con la caña y se rompe. ¡Nooooo! Otra vez, ¡Nooooo!.
Beto me dice, ¡lo siento, este lo subo!, y lo jala hasta la lancha ya acostado, le mete las manos a la boca y después de tres jalones lo logra subir. ¡No lo podía creer! Rápido siéntalo en mis piernas, no lo podía sostener pues no sentía los brazos y lo resbaloso del animal, rápido las fotos y al agua. Lo movimos un tiempo dentro del agua, lo liberamos y el Silver se fue muy lentamente. Uno de mis sueños se había convertido en realidad, no me caía el veinte, no lo podía creer, ¡grite como un chamaco!. Angel también se trajo tres macabíes de Callo Ratón.
Como dice el maestro Serrat “ De vez en cuando la vida, te besa en la boca” y ese día ¡la vida me besó en la boca!.
Nunca me ha gustado escribir, pero a mis 56 años estas experiencias no se pueden dejar a la memoria, en muy pocos años ya no podré enfrentarme a estos monstruos y tendré que conformarme con lo que la vida me dé. Ya en esta ocasión mi estabilidad en la lancha no era la misma que hace años, la velocidad de mi mente no iba a la misma velocidad que mis brazos que eran más lentos. A pesar de que me metí al gim mis músculos y mis manos se acalambraban.
Mi buen amigo Marco Antonio, con un Baby Tarpon pescado en la noche
Me gustaría gritarle a los jóvenes que les gusta la pesca, que APROVECHEN su juventud, que se den el gusto de todo lo que quieran hacer con moderación y tomen lo que la vida les dé. El destino, nuestro destino se presenta de diferentes formas y a veces hace que la vida tenga revanchas, tomarlas pescando es una buena alternativa. TOMENLA.
Finalmente conocí “al Ruso” que llegó para despedirse de nosotros, toda una personalidad.
Recordaré esas cervezas en la playa, platicando con mis amigos y guías la reseña diaria. Las llamadas de todos los días de nuestros amigos Carlos Godoy y Roberto Ferrer que se alegraban junto a nosotros por todo lo sucedido. Grandes pescadores y mejores personas los dos.
Seguiré pescando hasta que dios lo permita en todos los lugares que pueda, en mis lagos, en mis ríos, en el mar. Todos los lugares y todas las especies son preciosos. No cambiaré las risas y mi jugada dominó los miércoles con mis amigos pescadores, Jorge Luis Ascencio, Jose Luis Solar, Fernando Lima y Angel Huertero.
Pero por ahora, me quedo con el recuerdo de unos grandes amigos, en una isla maravillosa y ….con el ¡Rey de Plata!.
Con eso me quedo yo.
Francisco Zurita Eraña.